camino por la calle
en la calzada de la izquierda
automóviles no pasan
la claridad, la luz, desde donde vienen?
cielo no es
no hay personas en la dirección opuesta
atrás, adelante, en la calzada de la derecha, sí
pero procesión no es
los árboles no tienen peso
pájaros no hay
el paso rápido de los adultos
y sus rostros siempre en frente
no los deja poner distancia
de algunos niños que los siguen
pasito apresurado
cerca al almacén reduzco
estendo mi brazo al lado
así que la niña toma mi mano
firme la alzo sobre mi cabeza
la leveza casi le hace volar
la sujeto en el aire
entre sus pelos negros no se vé los ojos
pero su sonrisa -
que és la de mi abuela, de mi amante, de mi hija -
serpentea, pega-se en mis antebrazos
en la continuación del movimiento doble
ella me lanza en lo aún más alto
donde, flotando
miro a las casas pequeñas con sus
ventanas geométricas
los cristales negros de la calle
los hombres que no están
la hoja de arce rojo que brilla y baila
en el viento que no hay
como a despedir-se
y es bueno
decididamente bueno
Nenhum comentário:
Postar um comentário